Blancorexia: la obsesión por los dientes blancos

A todo el mundo le gusta verse lo mejor posible y tener una sonrisa blanca y brillante. Realizarse un blanqueamiento dental en la consulta puede ayudar a lograr estos objetivos, sin embargo, algunos pacientes no están satisfechos con los resultados de sus tratamientos, por lo que buscan sesiones de blanqueamiento dental frecuentes y excesivas en un intento de tener sonrisas completamente blancas.

¿Qué es la blancorexia y cuáles son las causas?

Últimamente se está viendo que puede existir una obsesión que lleve a blanquear demasiado los dientes para que luzcan lo más blancos posibles; esto es un problema nuevo que los dentistas han comenzado a llamar blancorexia.

El hecho de que algunas personas no puedan dejar de blanquearse los dientes, ha comenzado a considerarse una nueva adicción. Dado que la decoloración es fácil y efectiva, las personas pueden realmente engancharse.

El problema comienza a ser real y puede considerarse un signo de alarma, cuando el paciente solicita de manera reiterada tratamientos de blanqueamiento dental cada poco tiempo o incluso, empiezan a usar productos blanqueadores sin ningún tipo de supervisión por parte del odontólogo.

Las principales causas que se han visto que influyen en esta obsesión por lucir una sonrisa más blanca, son principalmente la cascada publicitaria de diferentes productos que están a la venta y no conllevan ninguna supervisión por parte de los profesionales, el deseo de imitar a los famosos e influencers, y la verdadera falta de información respecto a las complicaciones que pueden conllevar el uso de estos productos de manera obsesiva.

Peligros de la blancorexia

La blancorexia puede tener muchos peligros porque, depende del producto que se esté usando, con qué frecuencia se esté usando y la condición previa de los dientes puede causar:

  • Sensibilidad en los dientes a los alimentos fríos o calientes, un efecto secundario que se exacerba cuando se blanquean los dientes en exceso.
  • Irritación de las encías, e incluso de la garganta. También puede causar sangrado de las encías llegando a ser bastante incómodo.
  • Erosión dental. Si los dientes están sobreexpuestos a los agentes blanqueadores, esto puede causar que el esmalte que protege los dientes se destruya, provocando verdaderos problemas de salud bucal, como caries y fracturas.
  • Daño irreparable en los dientes.

Tratamientos de blanqueamiento

La opción más segura para obtener una sonrisa más blanca es visitar al dentista para evaluar la condición de los dientes y valorar un cambio de imagen personalizado de la sonrisa y seguro que se adapte a las necesidades reales. También es recomendable evitar en lo posible los factores que provocan manchas y decoloración de los dientes, como el café, el té, el vino tinto y los refrescos.

Los tratamientos de blanqueamiento dental son en la actualidad el procedimiento dental cosmético más solicitado, habiendo aumentado considerablemente en los últimos años. Si bien la mayoría no llegaría a llamarlo una adicción, muchos dentistas sí consideran que algunas personas se exceden en la búsqueda de la sonrisa perfecta.

Peligros y riesgos de los dientes y brackets caseros o falsos

En internet, y con el auge de las redes sociales, se promocionan una serie de consejos, tutoriales y modas, que lejos de solucionar un problema estético o de salud, pueden agravarlo de manera considerable, como advertimos en el artículo “Los trucos para blanquear tus dientes que no debes seguir en las redes”

El tema sobre el que tratamos en este artículo es la moda de fabricarse dientes postizos e incluso ortodoncias falsas de manera artesanal con un fin puramente estético, como sugieren algunos tutoriales que circulan en la red y que pueden ser sumamente perniciosos para la salud.

Brackets

Existe a moda juvenil de usar brackets como un complemento estético para emular a artistas que los llevan de forma colorida.

Algunos jóvenes buscan en internet la alternativa a realizarse un tratamiento de ortodoncia  porque realmente no necesitan el tratamiento o aunque lo necesiten, el fin que buscan no es funcional si no estético y existen páginas web y vídeos que explican paso a paso cómo fabricarlos, usando materiales inadecuados para ello, como cola de contacto, alambres y abalorios, que pueden servir para hacer una pulsera pero nunca para llevarlos en la boca.

Es importante educar a los jóvenes sobre cómo consumir contenidos en internet y más en temas relacionados con la salud.

Desde Clínica Dental Equipo Asensio Aguado siempre incidimos en que las prácticas y tratamientos relacionadas con la salud bucodental sean realizadas y supervisadas por profesionales cualificados.

Si realmente se necesita un tratamiento de ortodoncia en el mercado, existen muchas alternativas que pueden satisfacer tanto las expectativas estéticas como las de solución de problemas en la mordida.

Prótesis y dentaduras postizas

 

Las dentaduras postizas son prótesis destinadas a reemplazar los dientes perdidos. Pueden estar sujetas tanto por los tejidos blandos como por los tejidos duros de la cavidad oral. Existen diferentes tipos de prótesis dentales. Algunos diseños son removibles y otros se basan en la unión o sujeción a los dientes naturales existentes en boca o soportadas por implantes dentales.

Todos los tipos de prótesis dentales deben manipularse con cuidado. Las prótesis pueden estar hechas de acrílico, resina o cerámica. Todos estos materiales son vulnerables a dañarse si se golpean accidentalmente con un elemento más duro. Por lo tanto, si una prótesis dental necesita ser reparada o reemplazada, la mejor idea es acudir al dentista para que pueda realizar una valoración correcta de la situación y buscar la mejor solución.

Las personas que intentan arreglarse las dentaduras por sí mismas en casa, a menudo pueden empeorar la situación. Los profesionales dentales desaconsejan estrictamente el uso de dentaduras postizas caseras o el uso de kits de reparación de dentaduras postizas, ya que en lugar de ser una solución inteligente para subsanar un problema, las dentaduras postizas hechas en casa pueden empeorar la salud bucal.

Las prótesis hechas en casa pueden generar problemas estéticos, porque aunque se consiga un buen juego funcional entre los dientes, es muy improbable que ajusten de manera correcta a la cara.

La sonrisa es una combinación de la proporción correcta de los dientes, las encías y los labios. Este equilibrio, que es único para cada persona, solo puede ser recreado por el dentista siguiendo una serie de variables.

Por otra parte, las dentaduras postizas hechas en casa tienden a ser más económicas porque no utilizan los materiales adecuados (como hemos visto también en el caso de los brackets). Estos materiales pueden crear un aspecto casi natural, pero no suelen poder soportar la presión de las fuerzas de masticación ejercidas en la boca cuando se come. Además, estos materiales pueden no ser adecuados para la boca y pueden irritar las encías y los labios. Pueden provocar que la boca sea más vulnerable a las infecciones y causar más problemas dentales.

Este tipo de prótesis también pueden afectar a la funcionalidad de la cavidad oral. Los dientes no son elementos individuales del cuerpo. Tienen que funcionar a la perfección con las articulaciones temporomandibulares y con los músculos faciales para permitir que se pueda hablar y comer de manera correcta. El uso de kits de dentaduras postizas en el hogar puede causar dolor en la mandíbula por el simple hecho de que ésta no funcione de manera correcta con ese tipo de prótesis  o incluso no se encuentre una posición de descanso natural.

Por otra parte, los kits de reparación de prótesis en casa no pueden reparar dentaduras postizas agrietadas o rotas de manera correcta. De hecho, el uso a largo plazo de estos materiales puede causar una irritación continua en las encías y la aparición de llagas. También pueden provocar una pérdida ósea más rápida. Si nuestras prótesis dentales, tanto removibles como fijas están agrietadas o rotas, lo ideal es acudir al dentista de inmediato, quien podrá valorar la situación y ofrecerle la mejor solución.

Hay personas que utilizan superpegamentos a base de cianoacrilato, los cuales tienen una rápida adhesión y una gran resistencia, para reparar sus prótesis dentales. Esto no es una buena opción, siendo completamente desaconsejada por los dentistas. En primer lugar, este tipo de superpegamentos son tóxicos y si se ingieren a través de las prótesis colocadas en boca, puede causar más problemas. En segundo lugar, el uso de este superpegamento para reparar las prótesis suele impedir que la reparación en clínica por el odontólogo o por el protésico dental sea más complicada o incluso imposible.

La tendencia al “hazlo tú mismo” ha tenido un aumento exponencial en muchos aspectos de nuestra vida, incluso en el tema de la realización o reparación de prótesis dentales. Esta tendencia es alarmante. Ante cualquier duda o ante la aparición de cualquier problema relacionado con la salud bucodental, lo mejor es buscar el consejo del odontólogo.

Conclusión

Las prótesis dentales y brackets caseros no pueden garantizar una buena salud e higiene dental, la cual es crucial para mantener una buena salud general. Las prótesis y las ortodoncias dentales diseñadas y fabricadas por profesionales son más costosas, pero sus beneficios son también mucho mayores; son estéticamente más agradables, de calidad superior y fabricadas con materiales seguros, logrando con todo ellos que la adaptación y la funcionalidad sean correctas.

Efectos de los cigarrillos electrónicos en los dientes

El uso de cigarrillos electrónicos o vapeo ha ganado mucha popularidad en los últimos años. Es cada vez más frecuente y particularmente popular entre los adolescentes y los fumadores convencionales.

¿El vapeo es una alternativa sana al tabaco convencional?

Las secuelas para la salud bucodental del tabaquismo convencional están bien establecidas. Por el contrario, el impacto de los cigarrillos electrónicos en la salud bucal todavía no está claro.

Es bien conocido que el tabaco mancha los dientes, causa enfermedad de las encías y por lo tanto la posible pérdida de dientes y es uno de los mayores contribuyentes al cáncer oral.

¿El cigarro electrónico daña dientes y encías?

Nicotina y encías

Existe un mito común de que los cigarrillos electrónicos son mejores que fumar tabaco. Sin embargo, vapear sigue implicando suministrar nicotina al cuerpo, y la nicotina afecta, entre otras muchas cosas, a las encías. La nicotina causa vasoconstricción, lo que significa que la encía recibe un suministro de sangre más pobre. Esto hace que las encías sean más susceptibles a las infecciones y puede causar su recesión.

El vapeo utiliza un aerosol o vapor como sistema de suministro de nicotina, que tiene el mismo impacto negativo en la salud bucodental, independientemente de cómo se consuma.

Si bien el cigarrillo electrónico contiene una cantidad mucho menor de nicotina que los productos de tabaco tradicionales, sigue teniendo un efecto negativo en las encías. Incluso sin nicotina, otros ingredientes incluidos en el cigarrillo electrónico pueden deteriorar la salud bucal. Algunas complicaciones potenciales del vapeo y el uso de nicotina incluyen retracción de las encías, boca seca, sensibilidad dental, mal aliento, aparición de caries dental y de la enfermedad de las encías, así como la posibilidad de padecer cáncer oral.

Plopilenglicol

Uno de los ingredientes principales, además de la nicotina, es el propilenglicol, que es seguro para comer e inhalar, pero cuando se usa por vía oral se descompone en ácidos que dañan el esmalte e irrita los tejidos blandos. También causa sequedad en la boca, ya que elimina la saliva esencial, lo que provoca aparición de caries y enfermedad de las encías.

Beber agua puede ayudar a rehidratar la boca, pero no es un reemplazo de la saliva, que contiene compuestos que ayudan a proteger los dientes del daño del Streptococcus mutans, la bacteria que causa la caries dental.

Existen estudios que demuestran que el cambio del tabaco convencional a los cigarrillos electrónicos puede mitigar los síntomas bucodentales en los fumadores convencionales. Aun así, se han descubierto hallazgos que sugieren que una amplia gama de secuelas de salud bucal pueden estar asociadas con el cigarrillo electrónico.

De hecho, dado que los productos de tabaco tradicionales no contienen el propilenglicol, en este punto el vapeo sería peor para la salud bucal que el tabaco convencional.

Por otra parte, cualquier cosa que exponga las encías directamente al calor y a la nicotina, hará que exista mayor predisposición a desarrollar enfermedades de las encías y perder los dientes.

¿El vapeo mancha los dientes?

En relación con la tinción de los dientes, teóricamente, el vapeo debería tener un efecto menor.

Los cigarrillos convencionales vuelven los dientes amarillos y marrones, debido no solo a la nicotina, sino también al alquitrán que contienen.

Los cigarrillos electrónicos no contienen alquitrán, pero sí nicotina. La nicotina es incolora en sí misma, pero se vuelve de color amarillo claro cuando se expone al oxígeno.

Por lo tanto, vapear a largo plazo bien puede, al menos en teoría, también manchar los dientes.

Consejos

Debido a los efectos adversos que se ve que genera tanto el tabaco como los cigarrillos electrónicos. Lo ideal sería no usarlos o consumirlos. Sin embargo, si esto no es posible, lo que hay que hacer es cuidar nuestros dientes, lo que puede ayudar a reducir el riesgo de efectos secundarios.

  • Es importante limitar el consumo de nicotina. Optar por líquidos bajos en nicotina o sin nicotina puede ayudar a limitar sus efectos negativos en los dientes y las encías.
  • Beber agua después de vapear, evita la boca seca y el mal aliento, consiguiendo que la boca se rehidrate después de vapear.
  • Cepillarse los dientes dos o tres veces al día. El cepillado ayuda a eliminar la placa, lo que ayuda a prevenir las caries y promueve la salud general de las encías.
  • Usar hilo dental. Al igual que el cepillado, el hilo dental ayuda a eliminar la placa de las zonas donde no llegamos con el cepillo y promueve la salud de las encías.
  • Visitar al dentista regularmente. Si puede, visite a un dentista mínimo una vez al año para una limpieza y una revisión. Mantener un programa de limpieza regular ayudará en la detección temprana y el tratamiento de cualquier condición subyacente.

Cuáles son los síntomas de la Osteoporosis mandibular

La osteoporosis no es una enfermedad específica de la boca, ya que afecta a los huesos de todo el cuerpo, pero en este artículo veremos cómo puede influir en nuestra salud y estética bucodental.

¿Qué es la osteoporosis?

La osteoporosis es una enfermedad esquelética generalizada que se caracterizada por la disminución de densidad de la masa ósea y la degradación de la microestructura del tejido óseo.

Debido a ello, los huesos se vuelven más porosos, aumenta la cantidad y el tamaño de las celdillas y cavidades que existen en su interior, dando lugar a una mayor fragilidad del tejido óseo con el consiguiente mayor riesgo de fracturas.

¿Cuáles son las causas de la osteoporosis?

Aunque existen varios factores, como la deficiencia de calcio y vitamina D, los factores sedentarios y los factores genéticos; la deficiencia de estrógenos en la menopausia es la principal etiología conocida, ya que los estrógenos se encargan de regular la remodelación ósea y el cese de su producción provoca un desequilibrio en la remodelación ósea, lo que lleva a la fragilidad ósea y aumenta el riesgo de fractura.

¿Cómo puede afectar la osteoporosis a nuestra salud bucodental?

La osteoporosis y la pérdida de dientes son problemas de salud que afectan a muchos hombres y mujeres mayores. Esta enfermedad puede afectar cualquier hueso del cuerpo, aunque los huesos de la cadera, la columna vertebral y la muñeca son los más afectados.

Parece ser que existe cierto vínculo entre la osteoporosis y la pérdida ósea en los huesos maxilares. El hueso alveolar soporta y ancla los dientes. Cuando los maxilares se vuelven menos densos, puede dar lugar a la pérdida de dientes.

Pérdida de densidad ósea y periodontitis

La periodontitis es una infección crónica que afecta a las encías y a los huesos que sostienen los dientes. Las bacterias y el propio sistema inmunitario del cuerpo descomponen el hueso y el tejido conectivo que mantienen los dientes en su lugar. Con el tiempo, los dientes pueden aflojarse, caerse o ser necesitar ser extraídos debido a esta patología.

Aunque la pérdida de dientes es una consecuencia bien documentada de la periodontitis, la relación entre la periodontitis y la densidad ósea esquelética no está tan clara. Es posible que la pérdida de densidad mineral ósea alveolar deje al hueso más susceptible a las bacterias periodontales, aumentando el riesgo de periodontitis y, en consecuencia, de pérdida de dientes.

Tratamientos dentales frente a la osteoporosis

Implantes dentales

Los implantes dentales se han convertido en una opción de tratamiento común y frecuente para el reemplazo de los dientes perdidos. La evaluación de la condición médica de los pacientes es esencial para la correcta planificación del tratamiento. Las diferentes condiciones sistémicas que pueden presentar los pacientes pueden llegar a ser un gran desafío para los dentistas.

El éxito de los implantes dentales depende en gran medida de la osteointegración. Los factores que interfieren con la osteointegración actúan como una amenaza potencial para el pronóstico del implante. Por lo tanto, la osteoporosis se considera una condición cuestionable para la colocación de implantes dentales. Sin embargo, los diferentes estudios demuestran que los pacientes con osteoporosis no parecen tener un riesgo significativamente mayor de fracaso de los implantes. Por tanto, la osteoporosis no es una contraindicación para el tratamiento con implantes dentales.

Bifosfonatos y osteonecrosis

No se sabe a ciencia cierta si los tratamientos para la osteoporosis tienen el mismo efecto beneficioso sobre la salud bucal que sobre los otros huesos del esqueleto. Sin embargo, se tiene la esperanza de que los esfuerzos para optimizar la densidad ósea del esqueleto tengan un impacto favorable en la salud dental.

Los bisfosfonatos son el grupo de medicamentos disponibles para el tratamiento de la osteoporosis. Estos medicamentos actúan como inhibidores de la reabsorción ósea, lo que aumenta la densidad ósea al unirse a la matriz ósea y ralentizar la actividad osteoclástica (que destruye los huesos), lo que facilita la eficacia osteoblástica (que fortalece los huesos).

Su uso se ha relacionado con el desarrollo de osteonecrosis de la mandíbula, lo cual es un motivo de preocupación a la hora de tener que realizar tratamientos dentales.

La osteonecrosis se caracteriza por la exposición del hueso a través de una herida sin que haya mejoría en un periodo de 3 a 6 meses. El riesgo es mayor en pacientes que reciben grandes dosis de bisfosfonatos intravenosos, terapia utilizada para tratar el cáncer. La aparición de esta patología es rara en personas que toman bifosfonatos en su forma oral para el tratamiento de la osteoporosis aunque sí existe un pequeño porcentaje de aparición.

Los síntomas de la osteonecrosis incluyen retraso en la curación después de una extracción dental u otra cirugía oral, dolor, infección de tejidos blandos e hinchazón, entumecimiento, parestesia o hueso expuesto.

Aunque no está del todo claro si el uso de bisfosfonatos orales para el tratamiento o la prevención de la osteoporosis aumenta el riesgo de osteonecrosis mandibular, el consenso actual recomienda realizar cualquier cirugía bucal necesaria antes de comenzar un tratamiento con bisfosfonatos, promover una buena higiene bucal y un cuidado odontológico regular en pacientes que toman este tipo de medicamentos. Siempre que sea posible, hay que dejar de fumar. Se debe mejorar la higiene oral y la salud periodontal antes de cualquier cirugía para así evitar su aparición en la medida de lo posible.

¿Puedo donar sangre teniendo caries?

La necesidad de tener suministros seguros y protegidos de sangre y productos sanguíneos es universal. A nivel mundial, al menos 90 millones de unidades de sangre se donan cada año para salvar vidas y mejorar la salud de muchas personas. La sangre y los productos sanguíneos son necesarios tanto para la cirugía de rutina y como para la cirugía de emergencia, incluido el tratamiento que salva la vida de un número cada vez mayor de personas lesionadas en accidentes de tráfico, así como para el tratamiento de trastornos sanguíneos congénitos.

Por lo tanto, donar sangre es una gran manera de salvar vidas. Sin embargo, es importante evitar donar sangre cuando tenemos una infección activa o al poco tiempo de habernos sometido a un procedimiento dental.

Sobre la caries

La caries dental es una enfermedad infecciosa provocada por bacterias que producen ácidos, ácidos que interfieren en la superficie de los dientes provocando su descomposición. Sus síntomas pueden incluir dolor y dificultad para comer y sus principales complicaciones pueden incluir inflamación del tejido alrededor del diente, pérdida de dientes e infección o formación de abscesos.

Causas y prevención de la caries

La causa de las caries es el ácido de las bacterias que disuelven los tejidos duros de los dientes. El ácido es producido por las bacterias cuando descomponen los restos de comida en la superficie del diente. Los azúcares simples en los alimentos son la principal fuente de energía de estas bacterias y, por lo tanto, una dieta rica en azúcares simples es un factor de riesgo. La caries dental se asocia con una mala higiene bucodental.

La prevención de la caries dental incluye la limpieza periódica de los dientes, una dieta baja en azúcar y aplicaciones de flúor.

Relación entre la caries y la sangre

Una caries profunda que ha afectado al nervio del diente, puede enviar bacterias al torrente sanguíneo. Además, por lo general, el odontólogo recetará antibióticos si recientemente se ha realizado un tratamiento de endodoncia por estos motivos. Es conveniente que se haya acabado absolutamente el tratamiento antibiótico, incluso esperar una semana más después de terminado, antes de intentar donar sangre. Cualquier persona susceptible de recibir una donación de sangre generalmente ha sufrido recientemente algún tipo de trauma. Lo normal es que esté en tratamiento con diferentes tipos de medicamentos pudiendo darse muchas interacciones farmacológicas si la sangre donada presenta fármacos, lo que puede causar una serie de efectos secundarios no deseados y muy peligrosos.

Por otra parte, la sangre donada por personas que padecen enfermedad de las encías,  periodontitis, puede correr el riesgo de estar contaminada con bacterias, lo que provoca que los pacientes transfundidos sean más vulnerables a las infecciones hospitalarias.

La prevalencia de bacterias es mucho mayor en la sangre donada por personas con periodontitis en comparación con aquellas que no experimentan inflamación grave de las encías. Además, las bacterias que se originan en la cavidad oral evaden la prueba rutinaria que tiene como objetivo detectar gérmenes en crecimiento que pueden causar infecciones transmitidas por transfusiones en las donaciones de sangre.

Desgraciadamente, la infección desencadenada por la introducción de bacterias en un paciente a través de una transfusión sigue siendo una de las principales causas de mortalidad y morbilidad posteriores a una transfusión.

Las cirugías de encías o las extracciones dentales pueden hacer que la donación de sangre presente riesgos. Por ello, lo ideal es esperar hasta 48 horas entre estos procedimientos y la donación de sangre.

¿Se puede donar sangre después de un tratamiento dental?

Es aceptable donar sangre después de procedimientos dentales siempre que no haya infección presente. Realmente la donación va a depender mucho del tipo de tratamiento:

  • En tratamientos sencillos como limpiezas y empastes, lo ideal es esperar 24 horas, siempre que nos encontremos bien, no haya habido complicaciones y, no se tenga dolor, sangrado o infección.
  • Si el tratamiento ha consistido en impresiones dentales o colocación y ajuste de prótesis removible, no existe ningún inconveniente en donar sangre a continuación.
  • Tras extracciones dentales y endodoncias, lo mejor es esperar siete días siempre que estemos recuperados y sin síntomas. En cirugías más importantes, se suelen aplicar restricciones más largas.
  • Antes de cualquier procedimiento, se puede donar sangre, pero aún así es una buena idea esperar. Hay que darle tiempo a nuestro cuerpo para que se reponga de la sangre que se ha sacado.